A mi gran Amor, in memoriam, en el primer aniversario de su partida.
Este artículo va unido sentimentalmente a otro de mis artículos titulado "El viaje del alma" y del que os dejo aquí el enlace para que podáis leerlo, pues además se complementan.
Enlace al artículo de noviembre de 2017: "El viaje del alma": http://emizanonsimon.blogspot.com/2018/11/el-viaje-del-alma.html
Aunque va con la evolución personal de cada ser humano, la muerte, cada vez más, está dejando de ser tabú para muchas personas y contemplada y entendida como un proceso natural de la vida, de ahí que haya escrito estos dos artículos.
He querido también dejaros esta interesante entrevista, que hace poco realizó Victor Almela, periodista de "La Vanguardia", a la doctora Luján Comas, especializada en Anestesiología y Reanimación, y que por "causalidad" ha llegado a mí mientras preparaba esta entrada.
http://va.newsrepublic.net/article/i6606457547090035205?user_id=6537973904060661770&language=es®ion=es&app_id=1239&impr_id=6606537356960876806&gid=6606457547090035205&c=sys
Espero que tanto los artículos como la entrevista os gusten y los compartáis. Y sobre todo que viváis intensamente la vida: el mayor regalo que tenemos.
¡Feliz mes de noviembre y un fuerte abrazo de LUZ!
https://issuu.com/tmrevista/docs/tu_mismo_132?mode=window.pdf
http://hoyunclick.es/revista-no47-diciembre-2018
Nueva Consciencia
Opinión
por Emi
Zanón
XLIV - ¿POR QUÉ
VUELAN LAS MARIPOSAS?
A
mi gran Amor, in memoriam, en el primer aniversario de su partida.
<<Casi la piso. Salió de
entre mis pies moviendo majestuosamente sus delicadas y sutiles alas color
púrpura. La observé largo rato en su danza. A ella se unieron más mariposas;
unas grandes, otras pequeñas, de colores claros y oscuros, todos ellos
hermosos. Sin embargo, mi mirada sólo se fijaba en ella. Mi corazón quería
saber por qué vuelan las mariposas y se lo pregunté. Gentilmente se aproximó a
mi oído y en un susurro me dijo que, tras haber vivido una vida penosa de
oruga, y después de un breve período de recogimiento e interiorización en su
capullo, por fin había despertado a su auténtica naturaleza, y ahora volaba
feliz de regreso a casa>>.
<<La vida en sí
misma, con sus gozos y sus sombras, es el camino que nos lleva de retorno a
casa, a nuestro auténtico hogar, al hogar del Padre-Madre, al origen del
origen>>.
Desde que comencé a escribir estos
artículos mensuales de opinión “Nueva Consciencia” -publicados, desde 2004, en
diversos medios de comunicación, entre ellos el que ahora tienes delante-, cada
vez que se acercaba el momento de escribir el correspondiente al mes de
noviembre, en el que siguiendo la tradición de nuestro acervo cultural se viene
celebrando el día de “Todos los Santos” y el día de “Todos los Difuntos”, he
escrito -si he sido consciente en esos momentos- sobre la trascendencia del ser
humano, sobre su paso, tras lo que llamamos “muerte” o cesación de la vida, a
otros planos de consciencia más elevados. Por citar algunos títulos mencionaré
“Vida después de la vida”; “La impermanencia”… y el último y más reciente del
año pasado: “El viaje del alma”, un hermoso y esperanzador artículo a mi
entender, al cual no pude darle la difusión que se merecía en su momento por
tener que afrontar, precisamente el mismo día 1 de noviembre, día de “Todos los
Santos”, la despedida súbita y forzosa del gran amor de mi vida. Despedida que
me hizo ver lo integrado que tenía en mí todo lo que escribo y predico. Ha
habido aceptación plena, entendimiento, y me he quedado con todo lo positivo: tuvo
una vida intensa y feliz, con mucho amor, y se ha despedido de la manera que
tanto él deseaba: súbitamente y sin sufrimiento. ¡Ojalá que yo tenga la misma
suerte que él cuando llegue mi momento de partida!
Hemos dicho muchas veces que la vida no es sólo
una mezcla de moléculas al azar. La vida es mucho más que eso. La muerte es una
idea falsa. Y ya no sólo contemplada desde el mundo espiritual y metafísico
sino ahora también en nuestro tiempo de grandes avances científicos, y más
concretamente en el mundo cuántico.
Aunque es una cuestión evolutiva personal
de cada ser humano, debemos ser conscientes y educarnos, desde nuestros
primeros años de vida, a que nada, absolutamente nada, es permanente, nada es
para siempre. Formamos parte de un Universo en continua evolución: todo nace,
crece y muere o mejor digamos se transforma en otra cosa. Sufrimos y sentimos
dolor ante la despedida de un ser querido cuando no entendemos que todo es
impermanente, y que lo importante es vivir intensamente cada uno de los días
que estemos aquí, en este plano material de consciencia, que nos ofrece cientos
o miles o millones de motivos para ser feliz, para amar, para admirar toda la
belleza que nos rodea, toda la Creación, a pesar de no tener a nuestros seres
queridos físicamente con nosotros.
Con Amor, a todas las almas que han partido
y a sus familias. Y con el deseo de que la tristeza y el sufrimiento sean
transformadas en aceptación y entendimiento.
¡Feliz mes de noviembre!
“Conócete a ti mismo y conocerás el Universo”
Emi
Zanón
Escritora
y Comunicadora de la Nueva Consciencia
http://emizanonsimon.blogspot.com.es/
Me ha gustado mucho, muchísimo el breve relato de "por qué vuelan las mariposas" Para mí ha sido una forma esclarecedora de entender la vida y lo más importante creer que la muerte es una transición más o menos difícil de llegar a la libertad y a la belleza que, tal vez, deseamos.
ResponderEliminarCuánto me alegran tus palabras!! Gracias!!
ResponderEliminarUn abrazonde LUZ!
Muy bonito el relato, y muy emotivo, sabemos qué se termina una etapa, pero hay que seguir adelante, aunque nos quede un vacío que es imposible volver a llenar. Besos
ResponderEliminarSí, mi querida Conchi!! Siempre adelante con aceptación y entendimiento y disfrutando todo lo posible de nuestro paso por este precioso plano material. Un abrazo enorme de Luz!
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