He disfrutado muchísimo con la película "INTERSTELLAR" de Christopher Nolan, hasta el punto que la vi de estreno en Valencia y hace pocos días en mi pueblo. Y la recomiendo encarecidamente estas Navidades porque es cine de consciencia, como lo fue en su día y lo siguen siendo las maravillosas películas "CONTACT" y "2001 UNA ODISEA DEL ESPACIO".
A pesar de su larga y lenta duración con diálogos técnicos (rigurosa: agujeros de gusano, agujeros negros, física cuántica, etc. bajo el asesoramiento del físico-teórico Kip Thorne) y quizá demasiada música, pues a veces, en algunos momentos, se requiere sentir el silencio, es una película magnífica de ciencia-ficción que habla de sentimientos, de relaciones personales, sobre la humanidad, sobre la quinta dimensión de consciencia (somos seres multidimensionales) y sobre una fuerza maravillosa que lo mueve todo en el Universo: el Amor, y que todavía -como dicen en la película- los humanos no llegamos a alcanzar a entender del todo.
Albert Einstein decía que la ciencia ficción es un anticipo de las posibilidades de futuro. Es bueno que vayamos abriendo nuestras mentes hacia nuestros siguientes retos evolutivos.
¡Feliz Navidad de nuevo y no os la perdáis!